Unos globos blancos, un carro fúnebre y la incredulidad de los presentes, quienes entre el silencio se debatían las causas
del hecho, convirtieron los pocos metros entre la funeraria municipal de Los Girasoles y la tumba del Cristo Redentor, en donde reposarían los restos de Estainer Florentino, en una caminata sin fin.
Según numerosas
ediciones
, el joven de 25 años
y estudiante de termino de ingeniería de la Facultad
Autónoma de Santo Domingo (UASD), se encontraba
apostado en la acera frente a su casa con
un amigo, cuando numerosos
desaprensivos dispararon hiriendolo de muerte y emprendiendo la huida.
«Fue algo muy raro
, a mí pequeño
lo mataron y él no
sabe por qué murió; un amigo lo fue a conocer
a la media noche (del domingo) y el amigo aparentemente le había rosado con su transporte
a uno de ellos y de allá para acá él vino a confrontar al amigo y ahí se armó la controversia
que culminó con la vida de mi hijo», manifestó
entre el mal
el padre de Estainer, Sury Florentino.
El padre de seis hijos, definió a su vástago más grande
como «un ejemplo» y que siempre se encontraba
prestando asistencia
a quienes compartían con él.
Sus vecinos en Los Girasoles además
respaldaron la edición
del padre y manifestaron que Estainer «jamás
poseía
inconvenientes
con nadie».
«Ese jóven
te saludaba siempre que
te veía, jamás
tuvo un inconveniente
con nadie, nadie se quejaba de él, es más.. él ya se encontraba
gestionando mudarse a un residencial porque le había ido bien en el trabajo», narró una de las vecinas de Estainer.
En su sepultara, numerosos
de sus amigos se hicieron presentes y varios
lamentaban lo que pasó
mientras su madre y hermanos lloraban la perdida del jóven de 25 años.
Según con
las afirmaciones
del señor Florentino, hay uno de los tres señalados que ya está
detenido por la Policía Nacional, mientras se sigue en la búsqueda de los otros dos.