Mientras Rusia avanza con los bombardeos en localidades ucranianas como Járkov o Kiev, las situaciones dramáticas y devastadoras se multiplican.
Este miércoles nació en las redes un video estremecedor: a un ciudadano ucraniano le explota un misil mientras se está filmando.
Por lo cual se puede observar, el hombre se ubica en una región residencial y mientras se filma con su móvil describiendo la circunstancia, un sonido agudo invade la escena.
El sonido cada vez más fuerte, dura poco. Es una mezcla de turbinas cuando un avión despega y que uno se ha habituados a escuchar cuando mira una película de guerra.
Pero en esta ocasión es verdadera. Es un cohete que impacta de lleno en el sitio donde el ucraniano se se encontraba filmando.
El hombre asegura su cabeza y su cuerpo como puede, frente los vidrios estallados que caen sobre él, de la misma manera que cemento y escombros que caen al suelo.
A lo largo de algunos segundos la imagen es indescifrable. El lente no encuentra no quietud, ni foco. como su dueño intentando de salir de ahí con vida a como de lugar.
Tras la explosión, el hombre que filmaba solamente ha podido correrse mientras irrumpen en la escena numerosos escombros. Empieza a caminar hacia ningún sitio. Sin rumbo. Lejos de donde impactó la primera bomba, pero sin la seguridad de dónde caerá la próxima.
Mientras camina, se ve avisarle a alguien que está bien. Que no terminó herido. Pero en la parte de segundo que su rostro regresa a manifestarse en imagen tras la explosión, sus movimientos son desencajados.
EL CAMARÓGRAFO Y EL TANQUE QUE LE DISPARA
Un deslumbrante video de los asaltos del batallón ruso en las afueras de Kiev, Ucrania, recorrió las comunidades este martes provocando toda clase de reacciones en los internautas. En el clip se puede observar cómo un tanque de los soldados de Vladimir Putin dispara justo en dirección al edificio en donde se encontraba grabando el camarógrafo improvisado.
La persona que grabó el video estaba capturando los movimientos de un tanque ruso y seguramente jamás imaginó que el transporte dispararía exactamente en el lugar en donde se hallaba. La munición que salió del transporte no dio en la lente de milagro.
Después de que el proyectil explotara a pocos metros de el, el camarógrafo le quitó el zoom a su video y dejó a entrever que estaba en una salón destruida grabando por medio de una ventana. El clip acaba con él o ella seguro e tratando huír del lugar.